Aportación de Pruebas 1) LAS PROPIEDADES MUNICIPALES

La Plataforma Ciudadana contra el Muro de Cabueñes, concluída la testifical inicialmente considerada por el Juzgado de Instrucción Nº5 DP 2.843/09 (2/10/2009), y a la vista de las declaraciones efectuadas, realiza la aportación de nuevas pruebas

Aportación de Pruebas

1) LAS PROPIEDADES MUNICIPALES EN VINCULACIÓN CON LA FINCA LA LLOSONA Y EL PLAN


· En 07/1991 se adquiere por el Ayuntamiento a la Tesorería General de la Seguridad Social la heredad de Xicu Piñera, dos grandes fincas en Cabueñes.
· Cinco meses después (12/1991), Hoyant, empresa creada el año anterior por dos personas, compra la finca contigua al sur, para venderle una parte a José Ovidio Blanco Suárez, por entonces Jefe del Servicio Técnico de Urbanismo del Ayuntamiento de Xixón, a los tres meses (03/1992), por menos valor unitario que el que pagó.
· Esas tres fincas marcan y condicionan lo que luego se plasmaría como el Plan Parcial Universidad-Cabueñes, que se pretende justificar como el cierre de la ciudad de Xixón al este, afirmación tan grandilocuente e incomprensible como falsa y especulativa.
A principios de los años 90, el Ayuntamiento de Gijón disponía de fincas, por distintos orígenes, alguno de ellos activo, en Cabueñes.

Entre ellas destacaba la finca conocida como de Xicu Piñera, por sus llevadores tradicionales. Se identifica en la imagen adjunta, en las dos parcelas adscritas al plan y numeradas como 34 y 36, [rayadas horizontalmente en azul], vinculadas a la casería que se encuentra -dentro del perímetro del plan fijado con línea gruesa externa discontinua blanca- atravesada con línea fina discontinua blanca horizontal.
























Obsérvese que estas fincas, que en la imagen superior completa del Plan Parcial UZN C-1 Universidad-Cabueñes, cuya inclusión como suelo urbanizable dentro del PGOU redactado por el Sr. Teixidor (2002-2007) motiva su revalorización y las diligencias abiertas que nos ocupan, se aprecian con nitidez dada su extensión.
En efecto, estas fincas son las más grandes del Plan, y son cruciales por su ubicación, frente a la dispersión de las restantes.

Suponen entre las dos parcelas (34 y 36) unos 53.362 m2, suponiendo un 21 % del terreno que se pretendía incorporar al Plan Parcial.
El ayuntamiento disponía de otros 46.077 m2, entre otras 6 o 7 parcelas (dependiendo de la fuente) y cuatro viales, lo que suponía otro 18 % del total.
Es decir, que el Ayuntamiento de Xixón barajaba un 39 % de los terrenos.

Los predios objeto del proceso, la Finca LA LLOSONA, son los situados inmediatamente al sur de la heredad de Xicu Piñera, véase abajo, siendo La Llosona el reflejado como 38, y la parcela segregada a Ovidio Blanco Suárez la marcada como 37 [rayadas verticalmente en rojo y rosa].

La Llosona / 38, y su segregada La Llosina / 37 suponían otros 23.280 m2 y 2.492 m2, es decir, un 9’17, y un 0’98 %, respectivamente del Plan Parcial.












Ente las propiedades municipales y las adquiridas por Hoyant y el imputado, (La Llosona / 38, y La Llosina / 37), se garantizaba un 49’15 % de la actuación que se definió bajo la responsabilidad de Ovidio Blanco Suárez como arquitecto jefe municipal, y se articuló mediante Hoyant, empresa que se creó en 1990 y se cerró en 2007, una vez vendida la finca a REYAL URBIS, por 6 millones de euros.

Se manifiesta que esa actuación buscaba cerrar la ciudad por el este.
Entre el Plan Parcial y la ciudad, observamos el Monumento Natural de la Carbayera de El Tragamón (Decreto 21/2003 PA), el Jardín Botánico Atlántico y el corredor fluvial del río Peñafrancia, en un entorno rural, como se aprecia en la imagen inferior.












Además en la parroquia de Cabueñes es público y notorio el acoso a Xicu Piñera y a su familia por parte del Ayuntamiento para dejar la propiedad de un modo efectivo en manos del mismo, a partir de la pretendida adquisición municipal de la finca en julio de 1991, siendo Alcalde Vicente Álvarez Areces, por un acuerdo gestionado por la Alcaldía con la Tesorería General de la Seguridad Social.
El Ayuntamiento perdió en firme el pleito por la propiedad, inscrita para los llevadores en julio de 2007.

El papel de Cajastur en la finca de Cabueñes

OPERACIONES DE COMPRA VENTA ENVUELTAS EN POLEMICA POR EL ´CASO OVIDIO BLANCO´


El PP cuestiona el papel de la Caja en la finca de Cabueñes


Muñiz afirma que la propiedad no estaba hipotecada por la entidad

N. MORAN

El concejal del grupo popular en el Ayuntamiento de Gijón Pedro Muñiz aseguró ayer [5-11-2009] que la finca Xicu Piñera, que limita al norte con la finca La Llosona, y que en la actualidad es de Beyos y Ponga --entidad perteneciente a Cajastur-- en un 85%, no estaba hipotecada a esta entidad bancaria cuando fue adquirida por Beyos y Ponga.
La semana pasada la alcaldesa, Paz Fernández Felgueroso, había afirmado que es "normal" que una entidad bancaria se quede con unos terrenos si puede peligrar su crédito.
Sin embargo, Muñiz subrayó que la hipoteca era de "un banco que no es Cajastur", por lo que aseguró que "nadie se puede creer que de repente a Cajastur le dé por comprar esta finca que era del ayuntamiento".

Por este motivo, Muñiz preguntará a Felgueroso en el próximo pleno municipal --el viernes día 13-- qué influencia pudo tener como vicepresidenta de Cajastur en esta operación, ya que, según denunció hace dos semanas la Plataforma contra el Muro de Cabueñes, esta finca que era "decisiva" para desarrollar el plan parcial de Cabueñes pasó de ser propiedad municipal a estar en manos de Beyos y Ponga.
Igualmente, el edil insinuó que el exarquitecto jefe municipal Ovidio Blanco, que obtuvo una ganancia de 600.000 euros por la compraventa de una finca en Cabueñes, podría haber alertado a Hoyant, la inmobiliaria que participó en esta compra venta, que la finca sería urbanizable.

El concejal recordó que en julio de 1991 el ayuntamiento firmó un convenio con la Tesorería de la Seguridad Social para hacerse con la finca Xicu Piñera, de más de 50.000 metros cuadrados. Cinco meses más tarde, Hoyant compra La Llosona, lindante con Xicu Piñera.
" La compra fue casual? No sabía Hoyant que la otra finca la había adquirido el ayuntamiento para recalificarla en un futuro?" se preguntó Muñiz, quien considera que "esa información que sabía Ovidio Blanco presumiblemente fue transmitida a Hoyant".

Igualmente, el concejal explicó que la finca Xicu Piñera estaba libre de arrendamientos, según la Seguridad Social.
Sin embargo, un matrimonio ejerció su derecho de retracto y en agosto del 2007 la adquirió por 204.610 euros.
La arrendataria vendió la finca por algo más de cuatro millones de euros a Aguas de Panticosa, que posteriormente vendió un 15% de ese terreno a una promotora gijonesa por 2,15 millones de euros y el 85% restante lo compró Nozar por 12,1 millones, quien finalmente se la vendió por 11,1 millones a Beyos y Ponga.
Muñiz recordó que con esta finca los promotores disponían de más del 50% del terreno para desarrollar el plan parcial de Cabueñes, por lo que pidió a la alcaldesa que explique su influencia para participar en esta operación en Cabueñes, ya que si esta finca no hubiera formado parte del terreno adquirido por los promotores no se hubiera llegado al 50% del terreno necesario para poder desarrollar el plan parcial de Cabueñes.

Igualmente, tanto los populares como la plataforma vecinal han pedido la comparecencia de Felgueroso, entre otros, en el caso Ovidio Blanco, que se reanudará la próxima semana con las declaraciones de la mujer de Horacio Costales, uno de los socios de Hoyant, y la viuda de Antonio Cueto, el otro socio de Hoyant, ya fallecido.

La ley del silencio

La ley del silencio

Los vecinos de Cabueñes han sabido moverse con inteligencia entre una maraña de informes

JORGE J. URÍA
MIEMBRO DE UPYD


Allá por el año 2003 los aldeanos y aldeanes de la zona rural gijonesa empezaron a poner en cuestión las modificaciones del Plan General de Ordenación Urbana de Gijón.
Unos porque sufrían en propia carne las expropiaciones de sus terrenos, otros mal pensados, porque tenían la mosca detrás de la oreja y el asunto olía a chamuscu en ciertas zonas.
Desde luego hay cosas que el paso del tiempo no consigue borrar y aquellos polvos han acabado enfangando la gestión urbanística de la villa que nuestros próceres calificaban, y aún hoy califican con cierto desparpajo, de "modélica".

Sirva o no de modelo, lo cierto es que el urbanismo de la ciudad se enfrenta a las sospechas que han pesado sobre otros dignos consistorios en los que, por cierto, la cosa acabó como el rosario de la aurora, y no resulta menos cierto que sobre el asunto se ha corrido año tras año un manto de silencio que solo ha roto la zona rural con efectistas protestas al principio, blandiendo banderitas verdes que desde el Ayuntamiento, con cierta suficiencia, siempre se vieron como legítimo derecho constitucional a la protesta, porque así lo manda el manual de las buenas maneras institucionales.

Los vecinos de Cabueñes han sabido llamar a las puertas adecuadas y moverse con inteligencia entre la maraña de documentos e informes que acompaña inevitablemente a un tema tan relevante como el diseño urbanístico de una ciudad.
Pican alto y quieren oír ante el juez las declaraciones de la Alcaldesa, Paz Fernández Felgueroso, Pedro Sanjurjo, Concejal de Urbanismo y su antecesor Jesús Morales, creando con ello una situación que supera lo que el manual de las buenas maneras institucionales aconseja, y por eso José Manuel Sariego, ignorando el legítimo derecho que asiste a los vecinos a defender sus intereses con las herramientas que pone a su alcance el Estado de Derecho, vuelve a llamarles como hiciera meses atrás, egoístas.
Igual que lo son, imaginamos, los de Roces y todos aquellos que han presentado recurso al Plan y han visto como el Tribunal Superior de Justicia de Asturias atendía sus demandas.

Llama la atención que ante la situación creada la Federación de Asociaciones de Vecinos de Gijón no se haya pronunciado. Quizá no quieran morder la mano que les da de comer, pero han de saber que solo hace falta un puñado de ciudadanos obstinados en la defensa de lo que consideran justo para que la omertá se rompa.


Publicado en La Nueva España el 05 de noviembre de 2009

Necesitamos al doctor Mateo

Necesitamos al doctor Mateo

Ana García
Presidenta de la Asociación de Vecinos de Cabueñes-La Pontica


Hace ya un año que por estas fechas Amalia, la Presidenta de Fontevilla, publicaba una fuerte carta contra el proyecto de urbanización previsto para Cabueñes que titulaba muy acertadamente “Destruir Cabueñes es barbarie”.

Unos días después, el 19 de junio, Cristina, la portavoz de la Plataforma contra el Muro, denunciaba los intentos de exclusión de varios vecinos en un congreso de sostenibilidad urbana aquí en La Laboral, que intentaban poner en evidencia el contrasentido que supone estar firmando por un lado la Declaración de Gijón para impulsar la participación ciudadana en los procesos de construcción de la ciudad y el compromiso con el entorno y el desarrollo sostenible, y por otro promoviendo el destrozo del lugar donde vivimos.

Y yo misma intentaba, también por esas fechas, transmitir en el artículo, “¿Reordenación o destrucción?”, la idea del sinsentido que supone ser premiados por ser el 'Pueblu más guapu de Xixón' y permitir poco después que dejemos de ser, además de 'guapu', también 'pueblu'.

De entonces acá, como es bien sabido, se consiguieron además evidencias de irregularidades graves en la tramitación, y se demostró, con pruebas de compra-ventas con beneficios millonarios, que detrás se escondían intereses especulativos. El asunto ha llegado ya a los tribunales a instancias de la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Asturias, pero el Ayuntamiento sigue sin detener esa barbaridad.

Parece que hay que ser o venir de fuera para valorar lo que tenemos. Un ejemplo es el éxito televisivo del doctor Mateo.
Ha tenido que venir nada menos que de New York, la capital cultural y económica del mundo, un médico de prestigio, aunque soso y un poco moco seco, para decirnos que en un pueblín de aquí, como éste, sin muros de bloques de edificios, ni carreteronas de seis carriles, también se puede vivir bien, disfrutando del trato con nuestros vecinos, paseando o corriendo por nuestros caminos y carbayeras, intercambiando objetos que ya no usamos en un mercadillo, o bailando la danza prima por San Xuan con nuestros hijos en torno a un fuego comunal.

En Llastres y en Cabueñes, en los pueblos pequeños, desarrollados armónicamente, puede conseguirse, sin renunciar por ello a dotaciones modernas ni vivir en la edad media. Disfrutar de una calidad de vida por la que merece la pena seguir luchando.

Pero es triste que ésto, dicho por un actor-médico en clave de humor melodramático y que tiene tanto éxito, no sirve ya cuando lo decimos los de aquí, aunque algunos sean también médicos de prestigio como el doctor Paco o el doctor Álvaro, quizás porque no son sosos o cascarrabias.

Tal vez deberíamos ir a Llastres e invitar al Dr. Mateo, a la maestra, a la cotilla locutora de radio aficionada, y a los demás famosos, a que rueden aquí uno de sus capítulos. Seguro que cuando todo el mundo vea esto, y sepa lo que quieren hacer, Cabueñes se convertirá en un centro de peregrinación turística.

Ni Laboral Ciudad de la Cultura, ni Jardín Botánico Atlántico, ni gaitas, la gente vendrá a ver los prados afectados por el ya tristemente famoso Muro de Cabueñes, fotografiarán los carbayos catalogados, los hórreos que van a desaparecer, y disfrutarán tomando el último culín en el Llagar del Mancu antes de que caiga bajo las hormigoneras.

¡Que venga pronto el doctor Mateo!

Publicado en la Fueya Vecinal nº9, junio 2009, órgano de expresión de la Asociación de Vecinos de Cabueñes-La Pontica