Ovidio Blanco sigue imputado

GIJÓN
Ovidio Blanco solicita recuperar su plaza de funcionario en Urbanismo
El exarquitecto jefe municipal da el paso dos meses después del sobreseimiento del caso de las compraventas en Cabueñes

M. MORO

Ovidio Blanco ha solicitado el reingreso a su plaza de funcionario en los servicios municipales de Urbanismo después de una excedencia prolongada de más de siete años. El propio arquitecto confirmó ayer [27-5-2011] a EL COMERCIO que su instancia ya está presentada en el Ayuntamiento, aunque rehusó explicar los motivos que le han llevado a dar este paso. Una solicitud que llega después de las elecciones y justo dos meses después del sobreseimiento provisional de la causa judicial por las sucesivas compraventas de una finca en Cabueñes que le reportaron un lucro millonario.

La única traba que se interpone en este momento a la reincorporación de Blanco al Consistorio es el archivo disciplinario que se le abrió en el ámbito interno y que ha discurrido en paralelo al procedimiento judicial ahora archivado. No obstante, el sobreseimiento provisional de las imputaciones de cohecho, tráfico de influencias y uso de información privilegiada podrían conducir al cierre, también sin consecuencias, de dicho expediente. Y ello a pesar de que la conducta del arquitecto, por sus transacciones en Cabueñes, fue duramente criticada y puesta en solfa tanto por la alcaldesa como por el concejal de Urbanismo en funciones en estos dos últimos años.

Ovidio Blanco tomó posesión de su plaza de arquitecto superior en el Ayuntamiento de Gijón en julio de 1979 tras aprobar una oposición. En 1992 pasó a ocupar la jefatura de los servicios técnicos municipales, cargo que desempeñó hasta el 1 de enero de 2004, fecha en la que pasa a la situación de excedencia voluntaria.

Fuera ya del Ayuntamiento compaginó un contrato de colaboración con Sogepsa con el trabajo en su propio estudio de arquitectura. Entre los proyectos que cayeron en su manos destaca el que le encargaron los promotores del plan parcial de Cabueñes. Los vecinos de la parroquia averiguaron que Blanco, además de firmar el diseño de la polémica actuación, tenía intereses en la zona recalificada como nuevo urbanizable con la entrada en vigor del Plan General de 2005. Un planeamiento que él mismo dejó encauzado en el Consistorio antes de dedicarse al ejercicio libre de su profesión. En concreto, el técnico era propietario de una parcela que adquirió por primera vez en 1992 y que formó parte de sucesivas operaciones de compraventa hasta que en 2006 Reyal Urbis, una de las promotoras mayoritarias de la operación en Cabueñes, le compró el terreno de forma definitiva por 600.000 euros.

Poco después se puso en marcha una investigación judicial que llevó al arquitecto a declarar como imputado en los juzgados de Poniente en agosto de 2009. La carrera del técnico quedó a partir de ese momento profundamente tocada hasta el punto de que tuvo que renunciar a su trabajo en Sogepsa y al frente de la operación urbanística en Cabueñes para construir 600 nuevas viviendas.

«Refugio ante la tormenta»

La Plataforma Ciudadana contra el Muro de Cabueñes, que ejerció una de las acciones populares en la causa contra el arquitecto, valoró ayer la solicitud de Blanco como «una forma de buscar refugio ante la tormenta». Según este colectivo vecinal, «el Ayuntamiento no puede dar cobijo al técnico hasta que se resuelva por completo el expediente judicial en que está encausado». La plataforma tiene interpuestos recursos contra el auto de sobreseimiento provisional del juez Laborda y sostiene que «a todos los efectos Ovidio Blanco sigue imputado por su desempeño profesional en su etapa de arquitecto jefe municipal». Por ese motivo, confía en que «no se cierre en falso el expediente administrativo a una persona de confianza del gobierno socialista saliente».

Quien también medita en estos momentos su posible retorno al Ayuntamiento de Gijón es el consejero en funciones de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras, Francisco González Buendía. En el caso del también presidente en funciones de Sogepsa, éste aún no ha cursado la solicitud para reincorporarse a su antigua plaza de funcionario como abogado urbanista. Si Buendía sigue finalmente los pasos de Blanco, ambos podrían volver a trabajar juntos en los servicios municipales de Urbanismo años después.

Publicado en El Comercio el 28 de mayo de 2011