NO SALIMOS AÚN DE GUATEMALA Y ENTRAMOS EN GUATEPEOR
ANA GARCÍA
Presidenta de la Asociación de Vecinos de Cabueñes-La Pontica
Ya nos han dado el pistoletazo de salida para la 'participación ciudadana' en el nuevo Plan General de Ordenación urbana (PGO).
Entrar a valorar las alternativas que, de forma cerrada, nos ofrecen, no me parece forma de ejercitar nuestro derecho a participar en la gestión urbanística.
Soy muy escéptica respecto al caso que nos puedan hacer, a pesar de que la ley dice que deberán contar con todos. De nada sirvió cuando presentamos alegaciones al anterior PGO, y además siguen al frente como responsables los mismos políticos que no quisieron escucharnos con el Plan de Cabueñes, que nos ofendieron tachándonos de 'malos ciudadanos' y que nos obligaron a llevar el caso a los tribunales.
Pero mi desconfianza no quiere decir que debamos quedarnos cruzados de brazos mientras vemos como elaboran otro plan urbanístico que supone más de lo mismo.
En una lectura inicial de las tres alternativas vemos que en la número 0, no merece la pena detenerse, pues es prácticamente descartada por los propios autores alegando que en 4 o 5 años se agotaría la oferta de nuevas viviendas.
Este argumento es ya muy discutible, pues por un lado contempla la construcción de 10.700 nuevas viviendas en diez años y por otro en los diez años anteriores, la población de Xixón no ha aumentado en 10.000 personas. Suponiendo, en contra de las previsiones, que la población no decrezca, tocaríamos ya a más de una vivienda por persona. Podría seguir pero es una alternativa que no afecta especialmente a Cabueñes.
Y en la alternativa 2 tampoco hay referencias especiales a Cabueñes, es igual a la alternativa 1 pero más y peor.
Es a la alternativa 1 donde se traslada 'ce por be' todo lo nefasto que tiene el Plan de Cabueñes.
Se quiere ‘cerrar’ una ciudad edificando en lugar de buscar la integración con el entorno.
Se habla de continuidad del espacio urbano cuando desde La Guía no existe apenas urbanización y se pretende pasar olímpicamente por encima del Monumento Natural de la Carbayera del Tragamón o del Jardín Botánico como si se tratase de espacios urbanos.
Para integrar el Hospital en su entorno se propone precisamente edificar alrededor, pues 'obviamente' así pasará más desapercibido.
No se ha considerado la existencia del que debería ser monumento de referencia de Xixón, La Laboral, cuando la situación, masa y altura de los edificios cercanos debería analizarse minuciosamente para no limitar el campo visual ni romper la armonía del entorno. Y para qué hablar de nuestro trozo de Camino de Santiago, de nuestras Casonas Mariñanas o de nuestros hórreos.
Y qué decir de la sostenibilidad medioambiental y respeto por el entorno natural y paisajístico. Nuestras carbayeras, aparte de la del Tragamón, ni se citan, no se han querido ver las abubillas ni las oropéndolas que pasan temporadas aquí, ni las garduñas, ardillas y puercoespines que perecen atropellados, ¡como para hacer más carreteronas!.
Las pocas vacallorias [ciervos volantes] que quedan tendrán que aprender que en cuanto salgan de sus reducidos recintos naturales entrarán en un Cabueñes urbano y perecerán.
No sé si podremos evitar esto, pero en cualquier caso pasa por la participación activa de todos. Desde luego, si no hacemos nada, tenemos garantizada la destrucción de nuestro entorno, del Cabueñes que queremos patrimonio de todos.
Publicado en la Fueya Vecinal nº11, enero 2010
órgano de expresión de la Asociación de Vecinos de Cabueñes-La Pontica